Vicepresidencia Primera y Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda
Viu i conviu - MIRA
Viu i conviu
Ficha Técnica
- Promotor: Público
- Promueve: EVha
- Proyecta: Mentrestant (Irene Civera) y Jaime Prior
Proyecto PILOTO
Viu i conviu
La propuesta establece unos criterios dentro del marco físico, histórico y social, partiendo de un edificio existente en la Avd. Capuchinos, donde se establecen diferentes relaciones con el barrio, dentro de la comunidad y entre las unidades residenciales.
Se fomentan los espacios colectivos, la flexibilidad en las unidades de convivencia para su adaptación a las diferentes situaciones y necesidades, y se incorporan todos los mecanismos posibles para minimizar el impacto ambiental, favoreciendo una cultura del colectivo más sostenible y social.
Han prevalecido los siguientes criterios para la elección de materiales, obteniendo los siguientes resultados:
- Recuperación de elementos existentes en el edificio para su reubicación o reutilización con transformaciones ligeras (cerrajerías, pavimentos, revestimientos,...). Estos elementos (recogidos en el panel nº3) permiten un ahorro de 14.939 Kg CO₂ equivalentes (↓16.3 kg de CO₂/m² de superficie construida).
- Elección de materiales con baja huella de carbono en todo su ciclo de vida útil (estructura y menajes de madera, aislantes ecológicos,… Algunos de ellos, como la madera o el corcho, tiene producción negativa de CO₂, puesto que proceden de especies vegetales que reducen el CO₂ de la atmósfera en su fase de crecimiento. Esto permite reducir en un 45% las emisiones de CO₂ emitidas por estos materiales en comparación con sus homólogos tradicionales (↓13.7 kg de CO2/m²)
- Materiales con facilidad de recuperación por sus características constructivas en seco (estructura de madera o metálica atornillada, policarbonatos de cubierta y fachadas, aislantes, cierres interiores,…), por lo cual su procesamiento en la fase de desmantelamiento será mucho más eficiente y factible.
Para su obtención se han realizado las mediciones de los elementos considerados para los principales elementos constructivos del edificio (cubiertas, fachadas, forjados, particiones interiores) y sus homólogos más comunes con solución CTE para nuestra zona climática y área geográfica. Los elementos no contemplados se han asumido equivalentes en el edificio estándar del CTE, y podrán proporcionar un mayor margen de ahorro de emisiones.
Por lo tanto, se produce una rebaja del 15% de emisiones de CO₂ en la fase de construcción, y del 61% en la fase de desmantelamiento gracias a las estrategias expuestas de recuperación de elementos, selección de materiales sostenibles y técnicas de construcción en seco.
Se prevé la recuperación de aguas grises para su reutilización o vertido en la red de pluviales municipal. También se recupera el agua de pluviales, reduciendo las sobrecargas sobre la red municipal en caso de lluvias.
En la cubierta se instalan compostadoras, que permitirán el vertido de residuos orgánicos debidamente seleccionados por los usuarios.
Se ha dispuesto una batería de medidas pasivas y activas para la mejor gestión del ambiente interior del edificio con el mínimo requerimiento de energía y agua potable. Los objetivos y estrategias han sido los siguientes:
- Capacidad de control de temperatura y humedad mediante elementos naturales, como la ventilación natural cruzada, la retención del calor y el control solar. Para lo cual se disponen elementos por toda el envolvente para el control o retención de la radiación solar (persianas alicantinas, sombreamientos, invernadero, tiro térmico), junto con aperturas que permitirán generar corriente de aire en el interior del edificio aún cuando éstas no se dan en el exterior.
- Reducción del consumo de agua mediante instalación de medidas pasivas de reducción de caudales (perlizadores) y sistemas activos para evitar el desperdicio de agua (Smart Water).
- Recuperación de las aguas pluviales y aguas grises para su depuración y reutilización en el propio edificio (WC, limpieza y riego). El excedente se aboca en la red de pluviales municipal para riego.
- Instalaciones térmicas mediante sistemas de alta eficiencia complementarios (aerotermia y pelets), que permiten satisfacer la demanda con el menor consumo posible, no dependiente de una única fuente de energía.
- Campo solar en la cubierta del edificio que permite que el edificio consiga la consideración de consumo casi nulo de energía no renovable.
- Huertos urbanos, que permiten mejorar la inercia térmica en la zona de cubierta.
Para la reducción de los consumos de energía del edificio se han planteado las siguientes estrategias:
- Mejora de la envolvente: además de disponer soluciones para el envolvente con un alto nivel de aislamiento y la eliminación de posibles puentes térmicos, se instalan carpinterías y acristalamientos con transmitancias muy reducidas.
- Control solar: las fachadas disponen de persianas alicantinas regulables por los usuarios, además de los balcones que recorren toda la fachada. La disposición de un espacio mixto o de transición, no condicionado, permite incrementar el espacio exterior en verano, sin que el sol llego en el interior, ofreciendo un espacio útil y soleado interior en invierno. En la cubierta se instalan captadores solares a manera de marquesina que proporcionan sombra en verano (además de energía), junto con el huerto exterior, y el jardín del patio en planta baja evita la radiación en las horas centrales del verano. Unos elementos textiles enrollables permiten reducir el asoleo sobre la cubierta y el patio en verano.
- Estudio del espacio central cubierto como regulador bioclimático: el invernadero que cierra el patio y parte de la fachada posterior proporciona un espacio protegido que evita el contacto del envolvente de las viviendas con el aire exterior, proporcionando un espacio con varias capacidades de regulación del ambiente interior. Este espacio, además, proporciona una mejor capacidad de ventilación cruzada de las viviendas.
Una galería en su cara este, conformando una doble piel, permite mejorar el aislamiento de este espacio. Las aperturas, superiores disipan el aire caliente en verano, mejorando la capacidad de succión con un diseño que proporciona efecto venturi, y lo retienen en invierno. Los captadores instalados en la franja norte, además de proporcionar electricidad, permiten calentar el aire contenido en la cámara inferior, que servirá para generar un tiro térmico en verano, expulsando el aire al exterior, o para su aprovechamiento en el interior del edificio, impulsándolo hacia la planta baja. Unas aperturas situadas en los frentes este y oeste permiten completar las capacidades de ventilación de este espacio, combinadas con las aperturas de la planta baja y las propias viviendas, que se beneficiarán de esta capacidad de generar succión al patio para tener siempre disponible ventilación natural.
Las aperturas motorizadas de este espacio permiten su autoregulación, aprovechando cada situación según unos parámetros programados, de forma que se aprovechan de manera óptima las condiciones exteriores hora a hora.
- Eficiencia de las instalaciones térmicas y generación de energía: Se dispone un sistema centralizado combinado, con un interacumulador de 1500 l, con generación por aerotermia de 61 kW/44 kW (calor/frío), por su alta eficiencia y compatibilidad directa con la energía aportada con las placas fotovoltaicas, además de poder generar frío y calor, secundado por una caldera de pelets de 22 kW con tecnología de condensación, que permite complementar el anterior con una baja huella de CO₂ y diversificar las fuentes de energía. El sistema permitirá priorizar una u otra tecnología en función de las necesidades, la producción fotovoltaica o los precios de la energía eléctrica y los pelets.
Tal como se ha indicado en el apartado de ciclo de vida, se opta por sistemas prefabricados de corte y/o colocación en obra, desde la estructura de madera o metálica atornillada, particiones en seco, … hasta acabados exteriores de policarbonato. Estos sistemas permiten reducir notablemente los tiempos de obra (entre 30 y 40%), los ruidos y molestias sobre el entorno y los residuos generados en obra.
El criterio para la automatización es gestionar y monitorizar el funcionamiento de las instalaciones y espacios comunes, proporcionando un ambiente saludable y con el mayor grado de confort que aportan las medidas pasivas. Los espacios privados serán gestionados por los propios usuarios, que deberán re-aprender a utilizar los sencillos mecanismos bioclimáticos que proporciona el edificio. Los datos individualizados de los consumos (electricidad, agua fría, agua caliente) fomentarán el uso de las medidas pasivas frente al abuso de las instalaciones.
Para el control de los sistemas se requiere la instalación de sondas (temperatura, humedad) y aparatos de medida (anemómetros, caudalímetros,…), que enviarán sus lecturas a un sistema central que permita la recogida de telemetría, de forma que puedan detectarse funcionamientos anómalos o averías, posibles correcciones del sistema para su mejora,… estos datos tendrían que poder monitorizarse a distancia, sumando la capacidad de enviar alertas a personal encargado del mantenimiento. De este modo, junto con un mantenimiento preventivo regular, se obtendrán beneficios: el óptimo funcionamiento del conjunto permitirá maximizar su ahorro, se reducen los requisitos de personal, que puede controlar edificios a distancia, y se posee un control directo y continuo del funcionamiento del edificio.