Las pautas tenidas en cuenta en el proyecto de rehabilitación desde un punto de vista de ahorro energético, han sido de tipo constructivo, así como la mejora de rendimiento en las instalaciones de climatización (calefacción y refrigeración), agua caliente sanitaria e iluminación, y la instalación de energías renovables o modificaciones de hábitos de los usuarios. Se ha proyectado bajo parámetros bioclimáticos que junto con el diseño de instalaciones de calefacción, refrigeración, agua caliente sanitaria e iluminación eficientes energéticamente y la diversificación de fuentes de energía, permitan un comportamiento óptimo y adecuado del edificio. Se ha regulado la presión del agua en los sistemas de suministro de agua colectivos para reducir su consumo. También se incorporan dispositivos que permitan la detección de fugas de agua de conducciones enterradas. Se ha asegurado que el entorno del edificio presenta una adecuada infiltración de las aguas pluviales. Se llevarán a cabo auditorías energéticas y sobre el consumo de agua de forma regular. Se realizará un seguimiento del proyecto que asegure la correcta ejecución de las medidas relativas a la sostenibilidad y a la eficiencia energética.

La mayor parte de la pérdida de energía del edificio existente se produce por su envolvente (fachadas y huecos –carpinterías) por ello hemos hecho especial hincapié en atajar esta problemática, actuando principalmente en estos focos. Se realiza una adecuada ventilación que garantice la calidad de aire interior. En nuestra zona climática, la ventilación es importante sobre todo en verano, por lo cual hemos enfatizado la ventilación natural cruzada y la ventilación nocturna, de forma que se conseguirá la pérdida de energía y disipar el calor acumulado en los cerramientos durante el día, por tanto en nuestro edificio mejoramos su envolvente al objeto de mejorar su permeabilidad y reducir su estanqueidad. Se regulará la potencia máxima necesaria de la instalación eléctrica. Se ha realizado un diseño de los espacios de manera que se potencie el sistema de iluminación natural. Se instalará un sistema de iluminación artificial en los lugares comunes del edificio que proporcione la máxima eficacia con el mínimo consumo. Se instalarán equipamientos, dispositivos y sistemas que permitan e impulsen el ahorro de agua durante el uso del edificio. En la presente Rehabilitación, hemos utilizado materiales de cubierta de alta reflectividad que mitiguen el calor, así como sistemas de aislamiento y absorción natural de la radiación (elementos ajardinados en fachada), para combatir de manera pasiva la transmisión térmica hacia el interior de las edificaciones. A su vez se han utilizado un aislamiento térmico de cerramientos mediante el uso de materiales con capacidad aislante del calor o frío logrando controlar la temperatura interna de la edificación, para aislarla y para evitar la entrada de aire frío y repeler el calor producto de la radiación y exposición directa. También se han utilizado vidrio con características de baja emisividad para evitar pérdida de temperatura en el interior y reflexión de la radiación hacia el interior. En la presente Rehabilitación, pretendemos que los materiales elegidos pasen por ensayos de choque que determinen la fragilidad o capacidad del mismo para absorber cargas espontáneas y obtener, por tanto, su grado de resiliencia. Se trata de deformar el material hasta su límite elástico para averiguar su capacidad para determinadas construcciones. No es una propiedad del material sino un índice comparativo de su plasticidad en relación con las obtenidas en otros ensayos en idénticas condiciones. Por lo cual obtenemos una rehabilitación de gran RESILENCIA. Se ha diseñado el edificio de modo que permita la incorporación de nuevas instalaciones en el futuro. Se han priorizado el uso de uniones mecánicas rápidas y desmontables.

El proceso de construcción será interactivo con la participación de los usuarios para que la consecución del proyecto constructivo sea satisfactorio y exitoso, de manera que conseguimos una reducción en el consumo de materiales dando lugar a una reducción del consumo de recursos, renovables y no renovables, y, por lo tanto, a la conservación del medio ambiente. Además se reduce la generación de residuos asociados al no producirse modificaciones al inicio del uso de la edificación que se traduce en una disminución del consumo de materias primas y de la ocupación del suelo por uso de vertederos. Se utilizarán lo máximo posible productos y elementos de construcción estandarizados. Se han evitado el uso de metales pesados en materiales y revestimientos de fachadas e instalaciones. Los tipos de paredes a instalar se han elegido de acuerdo a criterios de tipo funcional. Respecto a estos elementos, puede distinguirse entre aquellas paredes cuya ubicación ha de ser permanente y aquellas cuya ubicación puede ser temporal (aquellas que pueden cambiar para posibilitar nuevas distribuciones del ayuntamiento). En función de esta distinción tenemos distintos tipos de paredes como paredes macizas de ladrillo para paredes fijas y paredes realizables con sistemas de montaje fáciles y desmontables (placas de cartón-yeso) en paredes que cuya distribución pueda modificarse en el futuro. La rehabilitación se ha diseñado de manera que permita la incorporación de nuevas instalaciones en el futuro. Las condiciones higiénicas han sido importantes para conseguir un ambiente interior saludable. El diseño de la rehabilitación es apropiado para facilitar una limpieza fácil del mismo durante su uso y mantenimiento. Garantizar el cumplimiento de la legislación ambiental y de requisitos voluntarios más exigentes; anticipando, en la medida de lo posible, la adaptación a las nuevas regulaciones.  

Se aplica una política formal de gestión ambiental en la construcción así como en relación con las empresas de gestión de instalaciones. Se llevarán auditorías energéticas y sobre el consumo de agua de forma regular. Se ha obtenido el certificado de eficiencia energética del edificio y asegura que éste presenta las mejores prestaciones a este respecto. Se proporcionará al ocupante un manual de uso del edificio.

En la presente rehabilitación se ha analizado la posibilidad de incrementar la densidad de ocupación del edificio, estudiando las características en épocas anteriores, modificando la distribución original y creando un mayor número de usos. Se ha adecuado la densidad de ocupación a fin de optimizar el consumo de suelo y asegurar la viabilidad y accesibilidad a los servicios locales.

La sostenibilidad económica de la actuación está garantizada, ya que se trata de una construcción sustentable o perdurable, incrementando el bienestar y la optimización de recursos, en este caso, del sector de la construcción, promoviendo un consumo responsable de toda clase de insumos, elementos y servicios, donde se pone en marcha un sistema financiero basado en un actuar responsable con el medio ambiente, la sociedad y las metas propuestas para llevar a cabo el desarrollo del proyecto. Además, va de la mano con la Responsabilidad Social Empresarial, que buscaría promulgar el desarrollo social de los empleados y generar un ambiente laboral ameno, que les permita tener un crecimiento como comunidad en lo personal y profesional. Según el Informe Brundtland de 1987, también conocido como ‘Nuestro futuro común’, diseñado para la Organización de las Naciones Unidas (ONU), cuando se habría acoplado por primera vez la conceptualización de sostenibilidad: “El desarrollo sostenible es el desarrollo que satisface las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer las suyas”.  Se garantiza la calidad de los procesos implementados en la construcción, desarrollo y ejecución de las operaciones.